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El pasado 17 de Julio, se cumplieron
diez (10) años del rodaje del cortometraje de cinco (05) minutos realizado bajo
la técnica del Stop Motion, llamado “Un Pueblo Rico”, la historia de un
hombre nacido en un pequeño pueblo, que una mañana de trabajo arando la tierra
vio por primer vez brotar petróleo, liquido espeso y aceitoso que sería llamado
oro negro, y que en lugar de traer prosperidad a su tierra natal, trajo consigo
un modelo de producción industrial al cual los habitantes no se adaptaron y
terminaron dejando las tierras dedicadas a la agricultura para dar paso a la
explotación del hidrocarburo que prometía en voces de las grandes compañías petroleras,
desarrollo y mejor calidad de Vida para
todos.
La historia develo todo un
entramado de relaciones económicas y sociales en torno al negocio de la explotación
petrolera, pero además puso de manifiesto la importancia del manejo de diversos
rubros para la sustentabilidad económica de la vida social y el desarrollo de
las regiones, puesto que todos los sucesos que ocurren a partir del brote del
primer yacimiento petrolero en el pueblo, son vaticinados por el campesino
protagonista de la historia, quien megáfono en mano y luego de una profunda reflexión
se dirige a su comunidad en un plaza pública y le pide no vender sus tierras a
las compañías petroleras sino por el contrario, solicitarles que al tiempo que
se explota el hidrocarburo se invierta en la agricultura de la región y se
diversifique la economía regional.
“Un Pueblo Rico” Nace de la idea original del
Profesor Luis Fernando Claros-Posada, quien para ese momento hacia parte del
equipo de investigadores en materia de nuevas propuestas didácticas para la
enseñanza de la historia, en el marco del programa educativo “EDUCARTE”,
el cual adelantaba la Fundación el Taller Producciones en el municipio
Cárdenas del estado Táchira, frontera entre Venezuela y Colombia. La realización
en su totalidad fue desarrollada durante un taller de cuarenta (40) horas académicas
que se dio en la casa comunal del sector Colinas del Táchira, a 20 niños y
niñas con edades comprendidas entre los seis (06) y los catorce (14) años de
edad.
La propuesta didáctica de la
historia a partir del desarrollo de técnicas vinculadas a la realización
audiovisual marcan indiscutiblemente un proceso de aprendizaje que estimula la
creatividad del educando y permite la asimilación de los contenidos planteados
de una forma más expedita que si solo se dictaran o se mostraran mediante proyección
audiovisual, puesto que no solo los hacen llegar a modo de información que es
procesada, seleccionada y desechada en función de los intereses del receptor de
la misma, sino que por el contrario logra involucrar en el proceso de creación artística
los intereses particulares de aprendizaje del educando en torno al significado
y el significante de lo que desarrolla y aprende como proceso reflexivo de adquisición
y creación de nuevo conocimiento útil para su vida.
En el caso particular del cortometraje “Un
Pueblo Rico”, la técnica seleccionada fue el stop motion y su proceso
de realización se hizo a partir del trabajo con fotogramas, los cuales
posteriormente fueron editados durante el momento de postproducción que dio por
término al taller presentando como producto el filme. Se hizo un trabajo teórico-práctico
durante todo los encuentros sostenidos, se permitió darle forma a la idea con técnicas
que combinaron la lluvia de ideas hasta la construcción de cuentos que
adaptaban las historia orales y los recuerdos de los padres de los educandos
que se hallaban incursos en el taller, se facilitaron técnicas de modelado en
plastilina y diseño de escenarios o locaciones para la grabación de stop
motion, así como también la enseñanza de algunos planos fotográficos y su
significado a la hora de plantear lectura de la imágenes, finalmente mediante
un programa sencillo de edición de videos se enseño a los participantes como
editar las imágenes, como mezclar sonidos, como grabar voces y como exportar a
archivos que fueran compatibles con reproductores de video.
La enseñanza del cine animado en
esta experiencia fue el medio idóneo para intervenir la clase de historia a
nivel comunitario, en los espacios no convencionales de educación formal pero,
si de formación informal, los contenidos diseñados en ese momento para
fortalecer los conocimientos en torno a los lugares donde se encontró el
hidrocarburo, y el sentido de la explotación petrolera para la Venezuela de
principios de siglo XIX, llegaron a los participantes a través de una historia
contada por ellos, la cual los revistió no solo del velo que los hizo
realizadores audiovisuales sino además de conocedores de un proceso histórico y
hacedores de una nueva forma de contar historias.
Es de este modo, que el Centro
Comunitario de Investigaciones Sociales CENCIS, celebra hoy no solo los primeros
diez (10) años de la realización del cortometraje en Stop motion “Un
Pueblo Rico”, sino además de la importancia de continuar interviniendo
de manera constante y sistemática los espacios comunitarios, lugares naturales
de encuentro de los infantes y jóvenes de
Venezuela y del mundo que actualmente marcan el presente de las sociedades en
desarrollo. Acciones como estas, son acciones para la construcción de Cultura
de Paz como vía al desarrollo de nuestros pueblos.
Indiscutiblemente Un Pueblo Rico,
es todo aquel en el hoy que presta atención a través del fortalecimiento del
sistema educativo para que su presente construya el mañana de desarrollo y
mejora de la calidad de vida de sus habitantes, vaya nuestro agradecimiento al
taller Producciones, al Programa EDUCARTE, y al Profesor Claros-Posada por
haber marcado la ruta de las acciones que hoy continua desarrollando el CENCIS.
Equipo
de Difusión y Promoción del Centro Comunitario de Investigaciones CENCIS
-Venezuela
El sistema
escolar tienen un gran reto por delante en el abordaje de las situaciones de
violencia que cada vez generan un saldo negativo en el espacio escolar, las
dinámicas de la imposición y la fuerza han permeado el quehacer educativo en
todas sus instancias, donde la realidad y el contexto social se han apoderado
de espacios que deben seguir siendo destinados para la formación más allá de la
académica. La forma como se conciben y se entienden los conflictos debe
permitir también atenderlos y convertirlos en oportunidades para mejorar la
calidad de las relaciones de convivencia. 
